Expediente Abierto
► Educación
Ruta para una educación equitativa y de calidad
Académicos presentan una agenda de políticas públicas para promover más y mejores aprendizajes en todos los niveles educativos
►Por Martha Palma Montes
FOTO: DREAMSTIME
En México, en 2020, la población de tres años y más de edad era de 119 millones 976 mil 584 habitantes, de los cuales, solo 33 millones 795 mil 678 asistieron a un establecimiento de enseñanza escolar, de preescolar a posgrado; lo anterior con base en el Censo de Población y Vivienda del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Estudios de la Iniciativa de Educación con Equidad y Calidad, de la Escuela de Gobierno y Transformación Pública del Tecnológico de Monterrey, y la organización México Evalúa demuestran que solo el 7 por ciento de las infancias recibe atención educativa durante sus primeros tres años de vida, y únicamente el 62 por ciento asiste al preescolar.
Asimismo, de cada 100 niños que inician la primaria, solo 84 logran inscribirse en la preparatoria y apenas 54 la concluyen. De estos jóvenes, únicamente 28 egresarán de la educación superior, lo que implica una deserción de 72 de cada 100 alumnos.
Esto exhibe que los mexicanos alcanzan 9.7 años de escolaridad, es decir, la mayoría solo concluye la secundaria, sin pasar por servicios de primera infancia ni preparatoria, y sin completar los 18 años de educación obligatoria que establece la Constitución.
Ante este panorama, la Iniciativa de Educación con Equidad y Calidad y México Evalúa dieron a conocer el proyecto Aprender parejo: Hacia la construcción de una agenda educativa 2024-2030.
A través de una investigación multidisciplinaria, Aprender parejo busca que tomadores de decisiones, autoridades educativas, líderes sociales, la comunidad educativa, padres de familia y los actores interesados en la transformación de este sector en México cuenten con herramientas para impulsar la educación en todos los niveles.
“Por medio de peticiones de acceso a la información, decenas de entrevistas con profesores de los diferentes niveles educativos, autoridades educativas, sindicatos magisteriales, especialistas y miembros de la sociedad civil, hicimos un análisis de los principales problemas en materia educativa del país e identificamos propuestas concretas que pueden implementar los próximos gobiernos estatales y federal”, comenta Marco A. Fernández Martínez, líder de la Iniciativa e investigador asociado de México Evalúa.
Aprender parejo está compuesto de cuatro pilares asociados con áreas prioritarias de atención, que son: recuperar trayectorias educativas y aprendizajes, mejorar la infraestructura escolar, promover habilidades para la empleabilidad y fortalecer la gobernanza del sistema educativo.
MISMAS OPORTUNIDADES DE APRENDIZAJE
Para combatir la desescolarización provocada por las brechas de aprendizajes y la desigualdad social, Aprender parejo recomienda fortalecer la educación para la primera infancia a través de campañas de sensibilización sobre la importancia de la educación en los primeros años de vida, así como aprovechar la experiencia del cuerpo docente para recuperar aprendizajes mediante la colaboración entre niveles educativos, y reconocer alertas y buenas prácticas en las escuelas a través de diagnósticos de aprendizaje para identificar estudiantes en riesgo.
“Pocas veces hay una comunicación, por ejemplo, entre la media superior y la educación secundaria, o entre la secundaria y la primaria. Y es fundamental, dado los rezagos de aprendizajes en los que van evolucionando los chicos conforme avanzan a los siguientes niveles educativos”, refiere Marco Fernández.
MEJORAR LA INFRAESTRUCTURA
Aunque existen fondos destinados a optimar los espacios educativos, en 2024 aún el 40 por ciento de las escuelas públicas de educación básica carece de servicios esenciales como electricidad, agua potable, lavabos y sanitarios independientes, según datos de la Secretaría de Educación Pública (SEP).
Sumado a lo anterior, los recursos para infraestructura escolar serán un 46 por ciento menores hasta 2039, debido al pago de la deuda contraída por los bonos educativos de 2015, es así que la iniciativa Aprender parejo propone crear un Sistema de Monitoreo de la Infraestructura Educativa (SMIE), un programa específico para la extensión de jornada escolar con una propuesta pedagógica robusta, además de promover políticas efectivas de conectividad a Internet en escuelas públicas y el uso pedagógico de las herramientas digitales para el aprendizaje, en especial de los celulares, al ser los dispositivos más accesibles en los hogares mexicanos.
PROMOVER HABILIDADES
Aprender parejo advierte que, actualmente, el 54 por ciento de las vacantes en el mercado laboral nacional no son cubiertas por falta de habilidades y conocimientos de las personas que solicitan dichos empleos, y solo tres de cada 10 estudiantes que se gradúan, trabajan en su campo de estudio.
Por tanto, la iniciativa recomienda establecer una estrategia de vinculación efectiva entre el sector privado y el educativo, a fin de crear espacios de capacitación técnica para estudiantes. “También es muy importante la flexibilidad curricular para adaptar las clases al cambio tecnológico y a las necesidades de la inteligencia artificial, que van más rápido que la capacidad del sistema educativo para responder en la formación de los jóvenes ante estos nuevos retos que enfrentan”, advierte Marco Fernández.
FORTALECER LA GOBERNANZA DEL SISTEMA EDUCATIVO
A pesar de que existe el Consejo Nacional de Autoridades Educativas, es necesario crear un consejo federalista de infraestructura educativa y presupuesto, de forma tal que se establezcan estrategias integrales en la materia, entre los tres órdenes de gobierno, señala el especialista.
“Adicionalmente, proponemos establecer mecanismos de corresponsabilidad social, donde los padres de familia realmente exijan y defiendan el derecho a la educación, con la participación activa de estudiantes, empresas, sociedad civil, docentes y directivos”, concluye.
Marco A. Fernández Martínez.
FOTO: CORTESÍA DE LA ESCUELA DE GOBIERNO Y TRANSFORMACIÓN PÚBLICA DEL TECNOLÓGICO DE MONTERREY.